Arte pop
“El amplio concepto de casa en manos de una artista inquieta y evocadora, una serie de cuadros repletos de claves y secretos que extrañamente además de ser obras artísticas de pleno derecho también son planos, planos técnicos que a diferencia de estos no están dirigidos a delimitar y restringir fríamente volúmenes medidas o cotas, estas pinturas son planos emocionales de las vivencias que todas los hogares protegen celosamente, hojas de ruta basadas en la introspección, el recuerdo y la búsqueda que muestran tanto como ocultan, al fin y al cabo todos somos frágiles casitas con tabiques de piel”. (José María Escarastegui Mendoza)
Arte, ciudadanía y cultura popular:
"Arte de Cordel Recargado" en Valdivia (noviembre 2011)*
por Carolina Benavente Morales
cbenavem@gmail.com
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Ciudadanos-artistas en la Plaza
Una buena cazuela, un gran collage
Durante el año 2011, los chilenos nos familiarizamos con incontables manifestaciones que cautivaron a la ciudadanía y cohesionaron el movimiento estudiantil en torno a sus demandas por una educación gratuita y de calidad. Tal explosión de creatividad colectiva no se había visto antes en el país, pero los cuerpos pintados, los pasacalles, los suicidios colectivos y los flashmobs, entre otros, forman parte de una larga serie de intervenciones estéticas en la sociedad. Realizada en distintas localidades de Chile el sábado 19 de noviembre de 2011, "Arte de Cordel Recargado" no surgió directamente del movimiento estudiantil, pero es parte de esa otra historia que se hizo visible gracias a sus protestas. La actividad, organizada por la plataforma virtual llamada en forma irónica Museo de Arte Moderno de Chile (MAMCHI), consistió en que cualquier persona interesada pudiese exhibir sus obras de arte colgándolas de cordeles en el espacio público, con el fin de expresar sus propias y diversas reivindicaciones.
Debido a su mayor exposición mediática, las acciones artísticas dirigidas a la televisión y a las redes sociales acaparan la atención de ciudadanos y expertos, a pesar de que se acompañan y en general se imbrican a otras que carecen de tales características. En particular, “Arte de Cordel Recargado” no sólo privilegió la acción desenchufada y desconectada, sino que además se desvió de la estética pop predominante. En efecto, su referente es la literatura de cordel, un género popular rural-urbano que tuvo vigencia sobre todo en el siglo XIX y cuyo nombre responde a que sus pliegos impresos se vendían, justamente, colgados de cordeles. Esto plantea mucho interés desde el punto de vista de la relación de las intervenciones artísticas con la cultura popular, ya que, al recurrir a ésta, los chilenos movilizados de hoy ensayan estrategias estéticas que no tienen cabida ni en la masividad ni en la esfera virtual. Ahora bien, si este tipo de intervenciones persiguen la transformación social, ¿cómo fue que lo logró “Arte de Cordel Recargado”? Voy a abordar esta pregunta en términos de los agentes, los discursos y las prácticas socioestéticas enfocando la actividad realizada en Valdivia, en la cual participé.
Elaine y Willem de Kooning en East Hampton, Long Island, 1953.
Fotografía de Hans Namuth, (c) Herederos de Hans Namuth, 1991.
Harold Rosenberg. "Los pintores de acción americanos" (1952). Presentación y traducción.
por Carolina Benavente Morales
cbenavem@gmail.com
Presentación
Fotografía de Antonella R. Auda (Colectivo Quiltro)
(Des)haciendo el amor: mi video de “Bueno, bonito, barato”,
intervención urbana de colectivo Quiltro (2011)
por Carolina Benavente Morales
cbenavem@gmail.com
Termómetro del mundo, hoy las nuevas humanidades no podrían querer ser
otra cosa que la sonda arrojada, suicida, al corazón de su magma incendiado.
José Luis Brea (2010)