Recordando a Edgardo Antonio Vigo
Recordando a Edgardo Antonio Vigo en los 10 años de su fallecimiento
por Clemente Padín
Edgardo Antonio Vigo nace en 1928 en la ciudad de La Plata, Provincia de Buenos Aires y falleció el 4 de noviembre de 1997, en la misma ciudad. A principios de los 50 egresa de la Escuela Superior de Bellas Artes de la Universidad Nacional de La Plata. Unos años después, en 1953, a través de una beca, viaja a Francia, donde conocerá al artista venezolano Jesús Soto y entrará por primera vez en contacto con la escena del arte internacional. En 1954, ya de regreso en la Argentina, Vigo realiza una exposición de objetos de madera encerrados en cajas que ofrecían variadas posibilidades para ser manejados por el público. La muestra provoca un pequeño escándalo -el público destruye gran parte de las obras-, escándalo que lo seguirá acompañando durante gran parte de su trayectoria. Tres años más tarde, Vigo comenzará a trabajar en sus "Máquinas Inútiles".
Palanganómetro Mecedor para Críticos de Arte, 1965
Poema Visual (xilografía)
Diagonal Cero, 1961
El Tapón del Río de la Plata, 1973
En 1969 realiza su film "Blanco sobre Blanco: Homenaje a Kasimir Malevich" -que debía proyectarse de manera tal que la imagen quedara a espaldas del público. En ese mismo año, organiza la "Exposición Internacional de Novísima Poesía" en el Instituto Di Tella de Buenos Aires. El 30 de Setiembre de 1990 realizo durante la “Exposición de Ediciones de Vanguardia” en el Hall de la Universidad el señalamiento que me había enviado, el “Poema Demagógico”, una parodia del acto eleccionario. Mediante la emisión del voto en una urna de embocadura redonda y cuyos votos no eran formularios que repartí entre el público en donde se solicitaba que se expresara lo que se sintiera en ese momento y que, luego, lo introdujera en una urna especial con el orificio redondo. Las hojas debían arrollarse quedando en claro la simbología sexual del acto. La fecha tiene especial significación para mí ya que, a sus instancias, realicé mi primer acción, llamada “La Poesía debe Ser Escrita por Todos” (Isidoro Duchase), de carácter netamente poético. A partir de los años setenta se enfatiza el contenido político de su trabajo y, en 1976, cuando llega la dictadura militar a la Argentina, será afectado de una manera íntima y brutal cuando desaparece su hijo Palomo Vigo. Su poema visual "Sembrar la memoria" se convirtió en un emblema de la resistencia a la dictadura.
En 1991 se realiza en el espacio de la Fundación San Telmo, en Buenos Aires, una muestra con carácter retrospectivo que abarcará más de treinta años de la labor del artista. Vigo festejará la ocasión paseando por el patio de la Fundación montado en una versión remozada de su "Bi-Tri-Cicleta Ingenua". En 1994, es seleccionado para integrar el envío argentino a la vigésimasegunda Bienal de San Pablo, Brasil, logrando el reconocimiento mundial a ese nivel.
Máquina Inútil, 1965
A mediados de 1997, lo invitan a exponer obras en La Plata, y en Buenos Aires, en el Instituto de Cooperación Iberoamericana, donde presenta una importante exhibición de estampillas, postales, sellos y un variado material que Vigo realiza para su intensa actividad en el arte por correo. En su trayectoria artística, Vigo desarrolla obras en el campo del grabado siendo un xilógrafo autodidacta. Funda y co-dirige el Museo de la Xilografía de La Plata, participando en muestras, presentaciones y charlas para difundir la técnica y cultores del grabado en madera. Hoy día, una Fundación lleva su nombre y preserva sus obras en La Plata, dirigida por la Arquitecta Ana María Gualtieri.
Trelew, 1986, (xilografía)
Fruto de sus concepciones es este pequeño texto que reúne, sintéticamente, sus ideas con respecto al arte participativo publicado en el catálogo de la exposición "Poeta de la distancia" de Edgardo Antonio Vigo realizada en agosto de 1997, en la Galería I.C.I., Buenos Aires, Argentina: "Hacia un arte tocable que quiebre en el artista la posibilidad del uso de materiales "pulidos" al extremo de que produzcan el alejamiento de la mano del observador -simple forma de atrapar- que quedará en esa posición sin participar "epidérmicamente" de la cosa. Vía uso de materiales "innobles" y para un contexto cotidiano delimitador del contenido. Un arte tocable que se aleja de la posibilidad de abastecer a una "elite" que el artista ha ido formando a su pesar, un arte tocable que pueda ser ubicado en cualquier "hábitat" y no encerrado en Museos y Galerías. Un arte con errores que produzca el alejamiento del exquisito. Un aprovechamiento al máximo de la estética del "asombro", vía "ocurrencia" -acto primigenio de la creación- para convertirse -ya en forma masiva, en -movimientos envolventes- o por la individualidad -congruencia de intencionalidad-, en actitud.Una arte de expansión, de atrape por vía lúdica, que facilite la participación -activa- del espectador, vía absurdo. Un arte de señalamiento para que lo cotidiano escape a la única posibilidad de lo funcional. No más contemplación sino actividad. No más exposición sino presentación. Donde la materia inerte, estable y fija, tome el movimiento y el cambio necesario para que constantemente se modifique la imagen. En definitiva: un arte contradictorio."
Con un pié en el cajón y el otro aproximándose…, 1995
Para terminar, permítanme citar una nota anterior: “Difícilmente esta breve nota, sin ninguna pretensión crítica, pudiera abarcar todas o algunas de las facetas y dimensiones de este creador infatigable, apenas rescatar esquemáticamente su actitud frente al arte y a la sociedad en la que vivió y sufrió, de quien sólo pudo sujetarse a sus propias reglas y que, trató, durante toda su vida a ser consecuente con sus ideas libertarias. Su obra perdurará eternamente en tanto exista en el hombre ese afán por la libertad que él intentó mantener despierto enfrentándonos a la disyuntiva de elegir entre las variadas posibilidades de significación (incluso de alterar el sentido) que ofrecían sus obras y asumir y concretar así, a través de la opción, nuestra más genuina naturaleza : la aspiración a la libertad.”
LO CONOCI, VENIA A CASA A
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