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"Algo Más" de Ivo Babarivic
Precursor del abstraccionismo en Chile
Inauguración 21 de julio
Galería D21 (Nueva de Lyon 19, Depto 21)
Considerado como una gran promesa de la pintura vanguardista, Ivo Babarovic, participó activamente de la agenda plástica de aquellos años, compartiendo exhibiciones con Roberto Matta y José Balmes, entre otros.
Padre de la destacada artista Natalia Babarovic, dejó la exposición artística por su carrera de ingeniero.
En su constante investigación del campo plástico nacional, la Galería D21 ha redescubierto la obra de Ivo Babarovic, un pintor que mostró en Chile un interesante proyecto abstraccionista, entre los años 50 y 60. Ingeniero de profesión, su interés por la pintura lo llevó a seguir algunos cursos en la escuela de Bellas Artes en forma paralela a sus estudios profesionales, allí se convirtió en discípulo de Gregorio de la Fuente.
Babarovic comenzó a mostrar sus primeros trabajos a inicios de los años 50, participando en varias exposiciones colectivas de Chile y el exterior. Entonces seguía una figuración influida por las vanguardias europeas, que si hoy la observamos, nos recuerda a las primeras obras de Picasso, dando cuenta de cierto influjo cubista. Más tarde, pasó de lleno a la abstracción, desarrollando un lenguaje que haría característico, con composiciones de formas primitivas, y la elaboración de una especie de alfabeto con un cromatismo tendiente a los grises.
Su forma de trabajar recuerda las obsesiones productivas de artistas como Morandi, quien repetía una y otra vez el modelo en sus naturalezas muertas; Torres García, con su reiteración de elementos geométricos; o las formas libres de Calder. Babarovic buscaba la síntesis, recurriendo a elementos que muchas veces nos remitían a las simbologías precolombinas, como también a su propio mundo profesional de números y abstracciones, o bien, al imaginario infantil y los moldes y formas de aprendizaje del lenguaje y las matemáticas.
Todo eso confluía en la obra de este artista, que en aquellos años de juventud comenzaba a exponer junto a otras “promesas” como Inés Puyó, Juana Lecaros o el propio Roberto Matta- “son modernos sin convertir la obra en una fría ecuación plástica. Siguen muchos caminos” - aseguraba la crítica de la época.
Parte importante de esa producción, correspondiente a dos etapas en los años 50 y 60, fue rescatada por la Galería D21 (Nueva de Lyon 19, Depto.21) en la exposición “Algo Más”, que será inaugurada el próximo 21 de Julio.
De esta forma, D21 está dando cuenta de su rol de compromiso con el arte chileno actual, revisando su historia y reconstituyendo fragmentos que ayudan a entender las evoluciones visuales de nuestro medio.
Ivo Babarovic dejó la pintura, al menos en forma pública, y ha sido su hija Natalia, quien recogió ese legado, convirtiéndose en una destacada artista nacional, aunque con una opción pictórica realista, muy distinta al abstraccionismo geométrico que cultivó su progenitor.
IVO BABAROVIC. Nacido en 1924, se recibió de ingeniero civil en 1951 y participó en la actividad pictórica nacional desde 1952. Expuso en salones oficiales, obteniendo el segundo premio en pintura en 1956. Ese mismo año, realizó su primera exposición individual. Viajó luego al extranjero y en 1957 expuso en Washington y, con un grupo de chilenos, en Roma. Participó en numerosas muestras colectivas, tanto en Chile como en el exterior; integró el envío a la primera Bienal de México en1958, un envío a Buenos Aires en 1959 y otro a Ciudad Trujillo (Venezuela) en 1960. Expuso en forma individual en la Galería Beaux Arts de París, en 1964.