Música - Escáner Cultural, Revista Virtual.

PEARL JAM EN CHILE
EL GRITO DE UNA GENERACIÓN

La espera terminó, los nacidos en la década de los ochenta pueden estar más tranquilos. La leñadora que esperó pasivamente en el clóset, tuvo la mejor de sus noches. Era el día para volver a usarla. Bajo la suave lluvia su graduación. Saludos a Cobain, Seatle y eterna vida al grunge.

"Son un público bacán"... Sí. El mismo Eddie Vedder, parado frente al micrófono en el escenario montado en el estadio San Carlos de Apoquindo, ante una multitud delirante. 15 años tuvieron que pasar para que llegaran al último rincón del mundo.

Pearl Jam es la banda de una generación que creció con globalización, con MTV. No es como ver a McCartney, Bowie, Waters o a Gilmoure. A nosotros nadie nos contó lo bueno que eran en su tiempo o lo que significaron o significan para la música. Con estos crecimos de chicos, son la banda y el sentir de mi generación.

"Hoy vuelvo a nacer". Así me dijo un tipo mientras esperaba el lento avanzar del reloj. Es que la esperanza de ver a Pearl Jam en Chile se extinguía. Tantos rumores, que en muchos había resignación y el tema siempre aparecía en cualquier conversación distendida en algún lugar de la noche entre amigos.

Dos horas de ensueño para volver a la adolescencia, volver a los inicios de los años noventa, cuando el pop lo inundaba todo y Michael Jackson no paraba de vender con su disco Dangerous, mientras el rock, si es que se puede llamar así, lo lideraban bandas como John Bon Jovi y Poison que rescataban algún respiro agónico del decenio pasado.

Así la globalización observaba con admiración el crecimiento y la expansión de uno sus hijos predilectos. La cadena norteamericana de música MTV, seguía su inexorable camino de llegar a todo el mundo. Existía un canal para los jóvenes. Impensado hace algunos años atrás. Alguna mano poderosa se dio cuenta que el poder adquisitivo de los adolescentes podría reportar jugosas ganancias.

El reinado del pop terminó abruptamente y las pantallas se llenaron de chascones con barba, vestidos con leñadoras y bototos. Voz desgarradora, rasposa, guitarras fuertes y potentes baterías.

Sus videos eran distintos, predominaban los colores oscuros, suciedad, culebras, lluvia, truenos y deformación. El grito era tan fuerte, que más de alguien se asustó. El mundo les puso atención. Comienza el desencanto y como siempre la música era el mejor reflejo.

Todos venían de Seattle, ciudad ubicada al noroeste de los Estados Unidos y que es conocida como Rainy City ( la ciudad de la lluvia ). El factor climatológico y las condiciones sociales de la urbe, sin duda motivaron este sonido denominado como Grunge. Suciedad del mundo. ¿Insatisfacción?. Era tiempo de manifestarla.

El sello Sub-Pop fue el encargado de difundir a gente como Green River, Malfunction, Nirvana y Soundgarden de Chris Cornell. Así también estaba Alice In Chains y Pearl Jam. El estiércol de Seattle a la conquista del mundo

La segunda placa de Nirvana denominada "Nevermind", desplazó rápidamente al rey de pop. Esta producción no tardó en vender 10 millones de copias alrededor del mundo, seguidos de muy cerca por "Ten" de Pearl Jam, mientras Alice In Chains comenzaba a meter bulla con su disco "Dirt". La infección Grunge seguía por el mundo y tenía un aliado extraño. MTV.

Con cada golpe a la caja, Dave Grohl termina por inundar de polvo el gimnasio del video Smells Like Teen Spirit de Nirvana, mientras el auxiliar sigue con su interminable labor, las porristas tatuadas continúan alentando a esa gradería, en donde abunda el escocés y el pelo largo mal cuidado. Huele a espíritu adolescente. Cobain grita y grita al público, sin tener la certeza que lo estuvieran escuchando ... Hello, hello, hello, how long?. With the light out, it's less dangerous... A esta altura, todo y todos eran Grunge.

La excesiva exposición terminó por matar al movimiento. El mismo soporte que le dio el auge terminó por destruir un matrimonio imposible de llevar, porque el Grunge tenía más que una postura medial y comercial, era un sentir desde lo más profundo. Un llanto desolador para y contra todos, pero si ya no vendes como antes y tus canciones ya no llegan tan fácil al número uno, te desechan.

Poco después de grabar el disco Unplugged para la cadena MTV, el mismo Kurt Cobain señalaría su descontento después de grabar el desenchufado en Nueva York. Para él la grabación fue venderse de mala forma al sistema. Era el disco que menos le gustaba, es que más se arrepentía de haberlo hecho.

Tantas contradicciones terminaron por matarlo. Escopetazo y todo fue historia. No aguanto la presión, al final se cumplió la premisa. Morir para ser definitivamente una estrella del rock.

Después Pearl Jam combatía con el gigante de Ticektmaster por el porcentaje de las entradas para sus conciertos. Declararon que se acababan las giras, los videos y las promociones de discos, sin embargo había una deuda pendiente. Era hora de escuchar el grito y el latir de la gente del sur del mundo.

"Es mejor quemarse que disolverse lentamente" Kurt Cobain.