La Performance como acto de fe

por Ignacio Pérez
unapalabra@gmail.com

Toda verdadera fe deviene acción y toda verdadera acción deviene en fe. Si entendemos por fe aquella confianza, seguridad o creencia profunda que poseemos por algo a menudo desconocido e incierto, un acto de fe es la puesta en práctica, incierta también, de nuestros credos, el ejercicio vivencial de nuestras convicciones. Todo acto de fe tiene la forma de un palí­ndromo: aquello que se vuelve experiencia, se vive porque se tiene fe en ello, pero se tiene fe en ello porque se ha vuelto experiencia. En ese transito, la vida es animada por una sola voluntad: creer. Se cree porque no se cree del todo. Actuamos para creer verdaderamente.

Performance "Ammm" de Aidana Rico, en pleno desarrollo

En el arte de la performance, arte de "presentación" y no de "representación" el artista performancista y su cuerpo, enhebrado en un espacio y un tiempo especí­ficos, pone en práctica una forma particular de fe, una fe expresiva que, mediante una acción o una serie de acciones reales y simbólicas, constituye para sí­ y para los otros una experiencia única e irrepetible. Esta fe que no es gratuita opera bajo la misma mecánica sintáctica de la naturaleza: son hechos, sucesos, eventos, experiencias los que nos dan evidencia de su existir. Un performancista, en esencia, tiene poco o nada que decirnos. En cambio, es mucho lo que quiere hacernos creer vitalmente. Durante una performance es mas lo que sentimos e intuimos que lo que logramos reconocer como discurso común, pues todo discurre más acá y más allá de lo verbal, antes y después de nuestros parámetros cognoscitivos, en esa dimensión fugaz de la experiencia. Porque primeramente todo lo que se dice en una performance no se dice ni de forma figurada ni metaforizada ni traducida: es un acto real lo que acontece ante nosotros. Y es esta y no otra su manera contundente de pronunciarse, de manifestarse, de hablarnos. El arte de la performance, que se parece al teatro pero no es teatro, que se parece a la danza pero no es danza, a nuestro parecer, trasciende la clasificación de género artí­stico. Más ético que estético, todo performancista parte siempre desde su propia vida, modificando su conducta y su comportamiento, tanto como lo indique su fe expresiva. En una performance, arte y vida son un mismo movimiento existencial.

Performance "Ammm" de Aidana Rico, en pleno desarrollo

Así­ es el caso de la performance Ammm de Aidana Rico, quien ha realizado la acción de escribir con arroz la frase AMEN AMEN AMEN en el piso de la Plaza Bolí­var del Centro de Caracas. En esta performance encontramos la puesta en práctica de su fe amorosa por la vida. Esta performance, realizada el 06 de Abril del año 2007, un viernes santo, tuvo una duración aproximada de veinte minutos en los cuales, Aidana Rico, vestida con un atuendo blanco y un sombrero, fue construyendo lentamente la frase AMEN AMEN AMEN, una debajo de otra, a vista de los numerosos transeúntes que por allí­ pasaban esa tarde. De que fuese viernes santo el dí­a de realización de esta performance, Aidana Rico confiesa no haberlo previsto. A nuestro parecer, no pudo haber contexto temporal más preciso que este, el de la religiosidad colectiva.

Performance "Ammm" de Aidana Rico, en pleno desarrollo

Para Aidana Rico, la Plaza Bolí­var del Centro es el ombligo de la ciudad, el corazón de Caracas, el Axis Mundi. El lugar escogido para la performance fue un lugar más o menos cercano al centro de la plaza, un lugar abierto y de paso. Eran cerca de las 4 y 30 de la tarde y por tratarse de un viernes de Semana Santa, ese espacio se encontraba transitado por muchas mas personas de las que usualmente van y vienen de la iglesia de la Catedral de Caracas. Digamos que la ciudad entera por esos dí­as se encontraba en una procesión gigantesca. La performance de Aidana Rico coincidió con esta procesión casualmente pero de manera coincidente. Habí­an muchos niños en la plaza, hombres, mujeres, ancianos, caminantes fortuitos que se detuvieron alrededor de la performance a observar. Las perspectivas fueron múltiples, los comentarios diversos.

Performance "Ammm" de Aidana Rico, en pleno desarrollo

Vale decir que Aidana Rico hace de cada performance que realiza un acto de fe. La fe puesta en la performance Ammm tiene su origen en un sueño. Un dí­a Aidana Rico soñó que realizaba esta performance, tal como ella misma lo cuenta: "Soñé esta performance y decidí­ que el soñarla era un indicio para realizarla". Aidana Rico ha transitado de la dimensión del sueño a la dimensión de la realidad, naturalmente, como si fuesen una sola. No representando sino presentando su fe, en la performance Ammm Aidana Rico vuelve realidad su sueño, haciéndonos entrega de un mensaje que es, en ambigí¼edad de significados, la invitación al amor y a la fe. En palabras de la performancista: "AMEN de amar y AMí‰N de así­ sea y al mismo tiempo que así­ sea y que amen, diciendo amo, amen, amemos, y diciendo amen que así­ sea, jugando a la magia del deseo como posibilidad de ser que tienen además las palabras".

Performance "Ammm" de Aidana Rico, en pleno desarrollo

Tal como sucede en la performance de Aidana Rico, sucede en el short film de Gerald Harringer titulado "Ma" protagonizado por el performancista alemán Boris Nieslony. Entre el 2002 y el 2003, este director austriaco filmó una pelí­cula performática de 16 minutos en la que narra la historia de una peregrinación iniciatica y fantástica, basada en un sueño que tuvo el mismo Boris Nieslony. En secuencias de acciones simbólicas de una sencillez abrumadora, podemos presenciar la aventura de un hombre que encarna el sueño de su vida: semillas cayendo en el pabellón de su oreja izquierda, una piedra pendulando en el aire amarrada a una cuerda, una mesa colgando de su espalda, una maleta vieja y usada, un atuendo blanco, un caminar a través de calles, autopistas, rí­os, montañas, bares, estaciones de tren. Todas las secuencias de imágenes configuran el universo oní­rico del protagonista, quien en un momento dado ha decidido volverlas realidad para ser registradas en el formato de una pelí­cula de cine. Al final de la pelí­cula, Boris Nieslony, en voz en off, nos dice: "Tiempo y no tiempo es esta perspectiva. Aún no amanece, pero planeando de un sueño a otro sueño, la muerte será despertar".

Una performance son siempre muchas performances. La lectura de una performance es como el acto de pelar una cebolla: capas llenas de significado, una debajo de otra, van construyendo una polisemia de sentido a medida que la acción se efectúa. Cuando intentamos descifrar el sentido total de una performance tanteamos sin querer un gran misterio: el de la vida misma. Y es que nunca es igual ver una performance en fotos o en video que presenciarla en vivo y directo. Hay un gozo y un riesgo en la experiencia de presenciar una performance en vivo y directo que son inenarrables e intraducibles. Constituyen nuestra textura existencial especí­fica como observadores en la que reconocemos y diferenciamos nuestras sensibilidades subjetivas. Es cuando podemos afirmar que el sentido de una performance es siempre caleidoscópico, pues hay tantas performances como tantos observadores existan. Quien se encuentra ante la ejecución de una performance, sabe algo que nadie más podrá saber nunca. Hay que vivirla para creerla.

Heredera de los aportes que Armando Reverón (de quien ha dicho Manuel Quintana Castillo fue el "precursor de la Action Painting" Revista Imagen No. 18, 15 de Febrero de 1968) y más adelante en las décadas de 1970, 1980 y 1990, artistas de la performance como Rolando Peña, Carlos Zerpa, Antonieta Sosa, Diego Barboza, Pedro Terán, Marco Antonio Ettedgui, Ángel Vivas Arias, entre otros performancistas venezolanos, legarí­an para la configuración en nuestro paí­s de este tipo de arte no-convencional, llamado arte de acción o performance, Aidana Rico pertenece a la actual generación venezolana de artistas de la performance que creen impetuosamente en la performance como un acto de fe. Fugaz y permanente, en la realidad y en el sueño, en la fe y en el acto, en la mente y en el cuerpo, Amen es la primera estrofa de nuestra canción vital. Aleluya de la vida.

Dirección electrónica de Aidana Rico: teveos@gmail.com

Aidana Rico, Amira Tremont e Ignacio Pérez hacen el weblog "Performancelogí­a":

PERFORMANCELOGÍA
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Columna de Marcela Rosen Murúa, Licenciada en arte de la Universidad de Chile.
- Hace muchos años estoy dedicada al arte acción y en los últimos tiempos a generar encuentros de artistas y a participar del arte en red.

Este espacio requiere de la colaboración de los artistas que tengan registros de sus obras y si no, por lo menos dibujos, las imágenes deben ser livianas en formato JPG y siempre deben venir acompañadas de un texto, además una muy breve biografí­a del autor.

Enviar las colaboraciones a marcelarosen@gmail.com
También está abierta la invitación a la discusión en torno al tema, conceptos, alcances, lí­mites y más...

Escáner Cultural revista virtual de arte contemporáneo y nuevas tendencias

Año 9 número 96 agosto 2007